A principios del año pasado escuché por primera vez el nombre del restaurante El Bulli, a medida que pasó el tiempo fui percibiendo la importancia de este restaurante en el mundo gastronómico, elegido 5 veces el mejor restaurante del mundo, donde al parecer la innovación o mejor dicho, vanguardia, es la reina.
El Bulli, ubicado en Cataluña, ha sido dirigido por 47 años por el chef español considerado una de las personas más influyentes del mundo, Ferrán Adriá. Bueno, la gracia de el estilo de este grande es la búsqueda constante de nuevas maneras de llevar los alimentos a la boca de los comensales, muy famosa ha sido su cocina molecular con la que junta, ya a un nivel mucho más desarrollado, la cocina con la química, logrando sus conocidas espumas, esferas con líquido dentro y la utilización de elementos como el nitrógeno para llegar a sus tan llamativos platos.
"Aire de zanahoria y tamarindo" |
La influencia de El Bulli y de Adriá es tan potente que Adriá comenzará a dictar cursos de ciencia y cocina nada más y nada menos que en Harvard, además de que hace sólo un par de días se estrenó un documental sobre el restaurante llamado: "El Bulli: cooking in progress", aquí les va un adelanto.
Me emociona ver la pasión, dedicación y nivel de sabiduría de Adriá y su equipo de trabajo, como de verdad son capaces de crear, y no de tan sólo reproducir recetas, que es lo que hasta el momento la mayoría hacemos. Falta taaaaaanto por aprender, pero eso me motiva, me emociona y me apasiona aún más.
Bueno la gran y más reciente noticia es que ayer El Bulli cerró sus puertas para dar paso a una nueva etapa, con un gran proyecto que es su transformación en una fundación sin fines de lucro, el Bulli Foundation, que tendrá como objetivo simplemente crear, de hecho su lema será "Libertad para crear", destacando que habrá riesgo, libertad y creatividad y que por ello no habrá horarios, ni reservas, ni rutinas. Y nuevamente Adriá nos confirma su mirada completamente distinta sobre la disciplina que eligió como profesión, la profundidad y visión panorámica que le da aprovechando su talento y éxito.
Adriá explica como funcionará la creatividad dentro de la fundación: "Habrá una dirección creativa compuesta por cuatro o cinco personas, y luego cuatro equipos formados por cinco personas cada uno, además de otro equipo “volante”, integrado por creativos que no sean de la Fundación, como diseñadores, arquitectos... Ver qué sistema adoptaremos en concreto es uno de los trabajos que nos hemos planteado para estos dos años y medio.
Mi colaboración como profesor invitado con Harvard servirá para ordenar toda la información de métodos creativos, de organización relacionada con la creatividad, etc., que son los temas que voy a enseñar en la universidad"
Para los que quieran conocer la esencia e historia del restaurante más a fondo les dejo el link de un documental de 10 episodios que cuenta la trayectoria del local desde sus inicios hasta ya convertirse en el referente de vanguardia que es hoy. Interesados hacer click aquí.
Mira que buena. Yo te iba a comentar de esto porque la otra vez estuvo acá David Weitz, que es quien trabaja con Ferrán Adriá en Harvard, hablando un poco de lo que hacían. Después la charla se tornó más técnica.
ResponderEliminarEn un congreso el año pasado hubo una degustación de esta cocina molecular: gominolas de aceite de oliva y una reducción de moscatel, endivias y café. La respuesta sincera de los amigos que lo probaron fue: "Malísimo y sin gracia." Quizás hay que tener un paladar más entrenado para disfrutarla, pero al menos la idea me parece buena.
Puede ser, en gustos no hay nada escrito, pero creo que como dices también puede tener que ver con el desarrollo de un paladar. De todas maneras lo que me mata, me apasiona y me encanta es la manera en que se trabaja con la comida, el lugar donde se le sitúa y la importancia que se le da a la creatividad, a la vanguardia, la seriedad con la que se investiga, trabaja y crea :)
ResponderEliminarHola Menshi:
ResponderEliminarSi estás pensando en hacer una pasantía en Francia, deberías aprovechar de hacer una también en España, es bastante fácil conseguir un cupo. Tuve la oportunidad de hacer un par ahí, y aunque terminé un poco desilusionada, de estos súper personajes de la cocina mundial, de todos modos fue una excelente experiencia.
Saludos!